Breaking Bad

El mes pasado no proclamé serie del mes. Da igual. Ésta serie bien podría merecerse tres meses o cuatro. Breaking Bad es una serie del canal de cable AMC que lleva dos temporadas en antena y que el pasado domingo emitió el primer capítulo de su tercera temporada.

Lo digo rotundamente, es la mejor serie en parrilla de todas las que sigo. Se trata de un drama sólido y crudo que siempre ha ido a más. La progresión de las dos pasadas temporadas me parece francamente envidiable y, por lo que pude ver en el primer capítulo de la tercera temporada, no creo que me defraude lo más mínimo.

Breaking Bad nos cuenta la historia de Walter White (Bryan Cranston), un profesor de química de instituto, cuya vida da un vuelco cuando le diagnostican un cáncer de pulmón.

Walter tiene un hijo adolescente, Walter Jr. (RJ Mitte), que padece parálisis cerebral; y, además, su mujer, Skyler (Anna Gunn), está embarazada de una niña. Con este panorama, Walter no sabe qué hacer para procurarles un buen futuro a su familia cuando él ya no esté. Un día, va con su cuñado (Dean Norris), una agente de la DEA, a ver una redada policial de un laboratorio de metanfetamina. Allí ve huir a Jesse (Aaron Paul), un antiguo alumno suyo. Walter acabará por asociarse con él y producir metanfetamina a fin de conseguir dinero suficiente para su familia antes de morir.

Ganadores de los Oscars 2010

Anoche se celebró la octagésimo segunda edición de los Premios Oscar que fue dirigida con bastante sobriedad por Steve Martin y Alec Baldwin.

La principal atracción, por no decir que la única, era el duelo Cameron-Bigelow: el éxito de taquilla de Avatar y la aplastante victoria de The Hurt Locker en los Bafta nos hacían dudar de cuál se alzaría victoriosa en la noche.

Al final, resultó ser la exmujer de James Cameron, el realizador de Titanic -desde ahora el exmarido de Kathryn Bigelow-, la que se lo llevó todo. Consiguiendo su película 6 estatuillas frente a las 3 que se llevó Avatar; entre ellas película, dirección y guión original. Fue una grata sorpresa porque aunque yo no doy un duro por Avatar, pensaba que sería la gran triunfadora de la noche. Me alegro mucho de haberme equivocado.

Para mí, por lo demás no hubo sorpresas salvo dos -y lo de Sandra Bullock, que aunque estaba cantado no me lo explico...-: El secreto de sus ojos se antepuso a La cinta blanca para alegría de todo español y argentino y Logorama como mejor corto de animación, cosa que no me explico porque a mí me pareció el peor de todos. Si no ganaba La dama y la muerte, que es lo que me hubiera gustado; al menos que ganara Granny O'Grimm's Sleeping Beauty, o cualquier otro, pero no Logorama. En fin.

Pudo haber sido mucho peor, aunque se ha evidenciado claramente que este año ha habido bastantes películas buenas pero ninguna excepcional. Misma suerte que, sospecho, correrá este año 2010. Una lástima.

Up in the air: intentando cazar fantasmas.

Título: Up in the air (Up in the air).
Director: Jason Reitman.
Guión: Jason Reitman y Sheldon Turner; basada en la novela de Walter Kim.
Intérpretes: George Clooney (Ryan Bingham), Vera Farmiga (Alex Goran), Anna Kendrick (Natalie Keener), Jason Bateman (Craig Gregory), Amy Morton (Kara Bingham), Melany Linskey (Julie Bingham).
Año: 2009.
País: Estados Unidos.
Duración: 108 minutos.

Up in the air es una película de la que no tengo mucho que decir. No tengo ni una extensa pila de alabanzas ni un compendio de quejas indignadas. Cuando vi el trailer no me planteé ni por un momento ir a verla: era el trailer en el que vemos a George Clooney dando una conferencia sobre el peso de nuestras vidas. Me recordó automáticamente al papel de Tom Cruise en Magnolia y concluí que era una película sobre un triunfador solitario que entra en la crisis de la edad madura. No me apetece, gracias.

El problema vino cuando, entre los Globos de Oro y las primeras críticas que aparecieron, la genialidad del guión de esta cinta empezó a sonar en todas partes. Si lo bueno de una película es el guión, haré cuanto pueda para ir a verla. Además, se trataba de una película dirigida y coguionizada por Jason Reitman -a quien ya con Juno, pese a que no me entusiasmó, le encontré un nosequé; y que, además, es el hijo del genial Ivan Reitman-. Finalmente, debatiéndome entre qué ver y qué no ver un lunes por la tarde, acabé optando por Up in the air.